Monte da Ravasqueira

Fue el fallecido Manuel de Mello quien en 1943 se hizo con Monte da Ravasqueira en Arraiolos, pero sería su hijo José Manuel de Mello, quien, además de dedicarla a la cría del caballo lusitano, inició en la misma el cultivo de la vid. 

De esta forma, cuatro años después de la plantación de las viñas en 1998, tuvo lugar la cosecha inaugural de la bodega con la que se elaboró el que sería el primer vino de la familia, embotellado y etiquetado como MR, si bien, como anécdota, cabe destacar que este nunca llegaría al mercado, siendo aún hoy todo un símbolo tanto para la familia como para los más de 300 empleados con los que cuenta Ravasqueira. Finalmente, 2003 sí que vio la puesta a la venta de un vino de la casa, Monte da Ravasqueira, etiqueta que siguió comercializándose hasta 2017. 

A día de hoy, la bodega posee 45 hectáreas de viñedos repartidas en 29 parcelas distintas de Borba, Évora, Redondo y Reguengos, cuatro de las ocho subregiones en las que se divide el Alentejo.

La variedad es uno de los rasgos característicos de Monte da Ravasqueira y se traduce tanto en los suelos, donde se encuentran desde esquistos, arcillas, mármoles o calizas, como en las castas cultivadas, las principales tintas de la zona como Alicante bouschet, Aragonês o Trincadeira, o las blancas Roupeiro, Antão Vaz y Arinto.

Y es que es sin duda la puesta en valor de la tradición, encarnada en la combinación de estas excepcionales condiciones geológicas con un clima claramente mediterráneo de fuerte influencia continental, la historia, la cultura y el medioambiente del Alentejo, y de la innovación la que está en la base de los vinos de la casa. 

En este sentido, desde 2012, la firma apuesta por una viticultura de precisión que se traduce en la completa y pormenorizada zonificación de cada bloque de cepas para poder lograr su máximo potencial. Así, el mapeo del viñedo de Monte da Ravasqueira es minucioso e incluye desde datos meteorológicos (humedad, lluvias, viento y temperaturas), hasta tanto el análisis topográfico de la finca y como de las uvas en sí. Este laborioso trabajo constituye uno de los pilares del concepto actual de los vinos Monte da Ravasqueira.

De esta forma, cada una de las elaboraciones, única, exclusiva y seductora, expresa fielmente el carácter de su microterruño de origen, sin perder tampoco de vista las tendencias y el gusto del público.